Ser Testigos de Cristo
En Hechos 1:8, Jesús nos llama a ser Sus testigos, reflejando Su amor y verdad en cada aspecto de nuestra vida. Este devocional te desafía a ser luz en tu hogar, comunidad y más allá, confiando en el poder del Espíritu Santo para cumplir con este llamado.
DEVOCIONALES
1/9/20252 min read
Texto Bíblico:
"Pero recibiréis poder, cuando haya venido sobre vosotros el Espíritu Santo, y me seréis testigos en Jerusalén, en toda Judea, en Samaria, y hasta lo último de la tierra."
— Hechos 1:8 (RVR1990)
Reflexión Personal:
Ser testigo de Cristo es más que compartir palabras; es vivir una vida que refleje Su amor, verdad y poder transformador. Un testigo comparte lo que ha experimentado y visto, no algo aprendido de manera teórica.
Para los discípulos, significaba hablar de la vida, muerte y resurrección de Jesús, demostrando con sus vidas que Su mensaje es verdadero. Hoy, ser testigo implica mostrar con nuestras acciones, actitudes y palabras quién es Jesús y cómo Su evangelio nos transforma.
El llamado a ser testigo comienza en nuestro entorno inmediato ("Jerusalén"): nuestra familia, amigos y comunidad. Luego se expande a lugares menos cómodos o familiares ("Judea y Samaria") y finalmente al resto del mundo ("hasta lo último de la tierra"). Cada creyente tiene un círculo de influencia donde puede ser luz, mostrando con integridad y amor lo que significa seguir a Cristo.
Oración:
Señor, gracias por el privilegio de ser Tu testigo. Llena mi vida con el poder del Espíritu Santo para reflejar Tu amor, verdad y gracia a quienes me rodean. Ayúdame a ser fiel en compartir el evangelio, tanto con mis palabras como con mis acciones. Que mi vida sea un testimonio vivo de Tu poder transformador. En el nombre de Jesús, amén.
Contexto Histórico:
En Hechos 1:8, Jesús da una de sus últimas instrucciones a los discípulos antes de ascender al cielo. Les promete que recibirán poder al venir sobre ellos el Espíritu Santo, capacitándolos para ser Sus testigos. Este llamado no estaba limitado a su entorno inmediato, sino que se expandía geográficamente desde Jerusalén (su hogar), pasando por Judea y Samaria (las regiones vecinas), hasta lo último de la tierra.
En un contexto donde los discípulos enfrentaban oposición y una gran diversidad cultural, Jesús les recuerda que no estarían solos. El Espíritu Santo sería la fuente de poder que les permitiría proclamar el evangelio con valentía, incluso frente a desafíos y persecuciones.
Aplicación:
Sé un testigo en tu hogar: Hoy, haz algo que refleje el amor de Cristo con tu familia, como escuchar, perdonar o servir con humildad.
Comparte tu experiencia: Busca una oportunidad para hablar con alguien sobre lo que Dios ha hecho en tu vida. No necesitas ser elocuente, solo sincero.
Muestra el evangelio con tus acciones: Haz algo práctico por alguien fuera de tu círculo cercano, como un vecino o compañero de trabajo, que demuestre el carácter de Jesús.
Fundación Bíblica El Sembrado
Formamos en valores y principios bíblicos.
© 2024. All rights reserved.
Síguenos a través de Instagram en Estudio Bíblico Cristiano

