"El Plan Perfecto de Dios"

Texto Bíblico:

"Y pensando él en esto, he aquí un ángel del Señor le apareció en sueños y le dijo: José, hijo de David, no temas recibir a María tu mujer, porque lo que en ella es engendrado, del Espíritu Santo es. Y dará a luz un hijo, y llamarás su nombre JESÚS, porque él salvará a su pueblo de sus pecados"

– Mateo 1:20-21 (RVR 1960)

Reflexión:

¿Cuántas veces nos encontramos en situaciones donde no entendemos lo que está pasando? Al igual que José, a menudo enfrentamos incertidumbre, temor y decisiones difíciles. Pero el mensaje del ángel nos recuerda que Dios está en control y Su plan siempre tiene un propósito más grande del que podemos ver en el momento.

Jesús vino a salvarnos, a darnos esperanza y una nueva vida. No importa lo complicado o imposible que parezca el camino, Dios está obrando y Su voluntad es perfecta. Nuestra parte es confiar, escuchar Su voz y obedecer, incluso cuando no lo comprendemos todo.

Aplicación:

• Ora: Pide a Dios que te dé claridad y paz en cualquier decisión que estés enfrentando. Recuerda que Su plan es perfecto y Él no te dejará solo.

• Confía: Cuando enfrentes incertidumbre, entrega tus temores a Dios y recuerda que Él ya ha preparado el camino.

• Obedece: Da un paso de fe, tal como lo hizo José, y actúa conforme a la dirección que Dios te da en Su Palabra.

Oración:

Señor, hoy te entrego mis dudas y temores. Ayúdame a confiar en que Tus planes son mejores que los míos. Enséñame a escuchar Tu voz y a obedecer con fe, así como José lo hizo. Gracias porque a través de Jesús me has dado salvación y esperanza. Amén.

José, siendo un hombre justo, había considerado repudiar a María en secreto al enterarse de su embarazo. En una sociedad donde este hecho podría causar vergüenza y deshonra, José actuó con compasión. Sin embargo, Dios le habló en un sueño, aclarando que el niño que llevaba María en su vientre era obra del Espíritu Santo.

El ángel no solo disipó sus dudas, sino que también le dio una misión: debía recibir a María y ponerle el nombre a su hijo, JESÚS, cuyo significado es "El Señor salva". Este nombre reveló el propósito del nacimiento del Mesías: salvar a su pueblo de sus pecados. Aquí vemos que Dios estaba cumpliendo Su promesa de enviar un Salvador, como lo habían anunciado los profetas.

La obediencia de José fue clave en este momento crucial. Al aceptar el plan de Dios, José dejó a un lado sus temores y confió en la soberanía divina.